Durante la comida se puede consumir agua según las necesidades.
Si se comen platos secos, es decir sin jugos o savia, es preferible tomar unos vasos de agua antes de cada comida.
Aquellos que quieran aumentar de peso deben tomarla después de cada comida.
Al consumir entre 8 y 14 vasos de agua al día, el metabolismo funcionará en forma óptima y gozará de buena salud. (Keshava Bhat).
Esta saludable, sencilla y agradable receta, la envía una consecuente y querida amiga quien se ha dedicado a seguir y a colaborar con este blog, de forma tal que lo divulga periódicamente, envía material para los trabajos y lo más importante, experimenta continuamente en su propia cocina, donde prepara ricuras para familiares y amistades.
Dinorah, que así se llama nuestra amiga, sabe combinar con verdadero arte los ingredientes y sabores naturales con su sazón maracucha y el resultado es siempre para chuparse los dedos.
Esta vez te doy las gracias por la receta Dino.
Ingredientes
1 kg de auyama
4 cucharadas de mantequilla sin sal
1/2 taza de azúcar morena o papelón rallado
1/2 taza de harina de trigo (preferiblemente integral)
1/2 cucharadita de polvo de hornear
1 taza de leche líquida
1 taza de leche líquida
2 cucharadas de pasitas. (Opcional)
Canela al gusto.
4 cucharadas de crema de leche.
Preparación.
Precalentar el horno a 350ºC.
Hervir la auyama con concha. Dejar escurrir. (Si se desea hacer la torta sólo con la pulpa, retirar la concha).
Hacer un puré con un tenedor y mezclarlo bien con el azúcar -o papelón- y la mantequilla.
Agregar la harina, polvo de hornear y la canela. Mezclar bien. Agregar la leche revolviendo hasta obtener una crema homogénea.
Agregar las pasitas y seguir mezclando.
Agregar las pasitas y seguir mezclando.
Colocar la preparación en un molde enmantequillado y enharinado.
Hornear por 30 minutos a 350ºC, o hasta que la superficie se vea dorada.
Retirar la torta del horno, bañarla en el mismo molde con la crema de leche y servir de inmediato.
Este es un postre muy sabroso, suave, nutritivo y económico. Les gustará.
La auyama, calabaza o zapallo, de sabor dulzón, es altamente nutritiva, hasta el punto de que se utiliza para combatir la anemia.
La pulpa es de color anaranjado, lo que es un indicador de su alto contenido de betacarotenos.
El puré de auyama es un excelente alimento para bebés, niños pequeños, personas con estómago delicado, ancianos etc., debido a que se digiere con mucha facilidad, tiene un agradable sabor, actúa como suavizante, ayuda a desintoxicar el organismo y contribuye a regular la función intestinal.
La auyama fortalece el sistema óseo, es excelente para curar alergias y para tratar problemas nerviosos.
La semilla de auyama es muy utilizada para el tratamiento de próstata y de vejiga y como remedio contra los parásitos intestinales.
La auyama se puede consumir bien sea hervida o al horno, en la preparación de cremas, sopas, hervidos, pudines, soufles, piras, quesillos, galletas, etc.
Su delicado sabor y textura, contribuyen a darle un exquisito toque a cualquier receta que la incluya.
Su delicado sabor y textura, contribuyen a darle un exquisito toque a cualquier receta que la incluya.
Nada tienes si no digieres bien. (Voltaire)
Fuente. Notas tomadas en talleres del Dr. KB.
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